Desde la Metodología ProCC sostenemos que el proceso de devenir sujeto psíquico es fruto de una construcción histórico-social, frente a saberes hegemónicos que dan cuenta de un hombre abstracto, ahistórico, de un hombre en general.
Por tanto, lo subjetivo deberá entenderse como un derivado de la actividad del sujeto, que se forma y cambia en el proceso de transformación del mundo exterior. En la búsqueda de satisfacción de sus necesidades se construye con los otros a partir de un vínculo, siempre social, que implica procesos de interacción y comunicación, marcados por un tipo de sociabilidad que emerge y es fruto del sistema que le da lugar.
Este interjuego de necesidad-satisfacción opera como causa interna de su desarrollo, siendo esta experiencia base y fundamento de la subjetividad.