¿Qué se puede decir de alguien que contribuyó a cambiar el ritmo de los acontecimientos?
Justo en momentos como los actuales, se hace muy necesario el rescate de figuras como la de esta mujer que nos ocupa, Marie Langer, a 23 años de su muerte, conmemorando los 100 de su nacimiento. El rescate de su pensamiento, de su tarea, de su praxis en el mundo que le tocó vivir.
Hablo ahora, claro está, de estos momentos concretos de nuestro mundo, en el que perecen de hambre 925 millones de seres humanos. De ellos, 23.000 niñas y niños al día; con altos grados de sufrimiento humano, con espacios del planeta esquilmados por la voracidad del capitalismo global, Pakistán como último ejemplo terrible… hablo del control insaciable de los EE.UU., del imperialismo sobre territorios y sobre subjetividades.
Hablo de momentos actuales, de la concepción del tiempo y el trabajo hoy, donde apenas tenemos tiempo real para pensar, para hablar, para juntarnos y reflexionar: Llenemos pues este tiempo, este lugar de encuentro para la reflexión con un recuerdo que nos hace ponernos en marcha, que nos moviliza marcando un camino.
Es necesario poner la mirada sobre ejemplos de vida que, aun con sus contradicciones y conflictos, supieron encarar las desdichas e injusticias, con el dolor a cuestas de muchas despedidas a la espalda. Y porque no basta sólo con quedarse mirando, y hemos de ser algo consecuentes con la trayectoria de alguien admirado, un poco más adelante diré algunas palabras en este sentido sobre nuestros quehaceres.